Tiembla tiembla

El fuerte (¡que si no!) sismo de ayer hizo que me sintiera como la familia de Cortázar en su cuento Simulacros, esa que construye un patibulo en el patio de su casa y es la sorpresa incomoda de toda la colonia. Esto porque creo que la mía fue la única familia -al menos en mi calle- que durmió en sus respectivas camas. Somos raros, sí, vaya, hasta los perros durmieron donde siempre, esto cuando hubo gente que durmio en sus carros y no en su casa precisamente, sino en las grandes explanadas de la ciudad. Mexicali es un caos y no porque se haya caído media ciudad, sino porque la idea de la falla de San Andrés y sus consecuencias es tan grande y poderosa, que en cada temblor nos preguntamos si nos convertiremos en isla o leyenda.

Ahora, el asunto se está convirtiendo -y perdón quien diga que no- en cuestión política, sobre todo cuando este año tenemos elecciones municipales. Para empezar, el gobernador panista Osuna Millan pretende declarar el lugar zona de desastre, situación de la que -afortunadamente- estamos muy lejos. Es cierto que se cayeron algunas construcciones, que dos colonias están inundadas por la ruptura del canal entubado, que el pavimento se agrietó y levanto en muchas vías del municipio, también es cierto que la ciudad quedó sin luz y agua y que siguió temblando, pero también es justo decir que los servicios quedaron restablecidos en un 95% antes del medio día de hoy, que los comercios funcionan con cierta normalidad, que las principales avenidas y accesos están en relativo buen estado y que no faltan los servicios médicos; no hay estado de desastre, la ciudad sigue de pie y como ante cualquier situación de riesgo se deben tomar mayores precauciones, como es en un estado de emergencia (en el que objetivamente si estamos) entonces ¿por qué declarar zona de desastre, por acceder al fondo, para qué, para intentar ocultar las malas decisiones y desvíos de la construcción de infraestructura, para apoyar al mismo campo que se ignora el resto del año, para reparar calles que tienen años sin mantenimiento? habrá que ver.

Aqui dejo una fotos para los interesados, sus donativos los puede mandar a mi cuenta personal, los necesitaré con eso de que la gente cree más en Madam Sasú y Nostradamus que en los psicólogos...


PS. mientras termino de escribir este post, sigue temblando... ya van cientoveintitantas réplicas. Fans, estoy bien, suertudos.